21 marzo 2016

Mitología de las constelaciones: Aries

Aries, el Carnero de Oro.


Aries ha tenido una importancia elevada en la tradición Griega, ya que es el grupo de estrellas por el cual pasa el sol en el equinoccio de marzo, lo que implica el final del frío y la llegada del buen tiempo.
Los Asirios, habitantes de la cuenca superior del Tigris, sacrificaban un carnero en honor al equinoccio, la constelación era conocida bajo los nombres de Altar y sacrificio.

El mito del Vellocino de Oro

En la mitología griega, el vellocino de oro era el vellón del carnero alado Crisomallo (Χρυσομαλλος). Aparece en la historia de Jasón y los argonautas, quienes partieron en su búsqueda para lograr que éste ocupase justamente el trono de Yolcos en Tesalia. Esta historia es muy antigua —era popular en la época de Homero (siglos IX-VIII a. C.) y probablemente date del siglo XIII o XIV a. C.— y por tanto se conserva bajo diversas formas, entre las que varían ciertos detalles. De esta forma, en versiones posteriores de la historia se decía que el cordero era hijo del dios del mar Poseidón y de Temisto (con menos frecuencia, de Néfele).

Atamante, rey de la ciudad de Orcómeno en Beocia (una región del sudeste griego) tomó como primera esposa a la diosa nube Néfele, con quien tuvo dos hijos, Hele y Frixo. Más tarde se enamoró y se casó con Ino, la hija de Cadmo. Ino tenía celos de sus hijastros y planeó matarlos. (En algunas versiones, persuadió a Atamante de que sacrificar a Frixo era la única forma de acabar con una hambruna.) Néfele o su espíritu se apareció a los niños con un carnero alado cuya lana era de oro. Los niños huyeron montando el carnero sobre el mar, pero Hele se cayó y se ahogó en el estrecho hoy llamado en su honor Helesponto. El carnero llevó a Frixo sano y salvo hasta la Cólquide, a la lejana (oriental) playa del mar Euxino. Frixo sacrificó entonces al carnero y colgó su piel de un árbol (a veces un roble) en una arboleda consagrada a Ares, donde fue guardada por un dragón. Allí permaneció hasta que Jasón se hizo con ella. El carnero se convirtió en la constelación Aries.

No hay comentarios: